Los 20 francos de oro, también llamados ‘napoleones’, fueron la base de la Unión Monetaria Latina (1865-1927), creada para unificar varias divisas europeas en una sola moneda que podría ser intercambiada en los países adheridos al acuerdo.
Las más populares entre inversores, por su accesibilidad y bajo premium, son los 20 francos franceses (‘gallos’ o ‘napoleones’), seguidos por los 20 francos suizos (‘Vrenelis’).
Entre numismáticos son más apreciadas las monedas del estándar acuñadas en otros países (20 pesetas, 20 liras, 20 francos belgas, 20 dracmas, etc) debido a su rareza.